
Taller Maud Lewiss
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Historia de Maud Lewiss:
Nació en 1903 en South Ohio, Canadá, y desde pequeña le encantaba dibujar. Pero Maud tenía algo especial: sus manos y su espalda eran diferentes porque tenía artritis reumatoide, una enfermedad que le hacía difícil moverse. Su madre le enseñó a pintar tarjetas de Navidad en acuarela y sus pinturas se inspiraban en sus recuerdos de infancia.
A pesar de eso, Maud nunca dejó de pintar. No fue a la escuela de arte ni tuvo grandes pinceles, pero con sus manos pequeñas y mucha imaginación, llenó su mundo de colores.
Se casó con el pescador Everett Lewis, con quien tuvo una bonita historia de amor. Según relato de Everett, Maud apareció en la puerta de su casa en respuesta a un anuncio que él había colgado en las tiendas de la localidad en busca de una mujer de la limpieza con residencia incluida para un hombre de cuarenta años. Unas semanas más tarde, contrajeron matrimonio. Vivieron la mayoría de su vida en la pequeña casa de una sola habitación que Everett tenía en Marshalltown, a pocos kilómetros al oeste de Digby. Esta casa le serviría también a lo largo de su vida a Maud como estudio de trabajo, donde ella comenzó a pintar en otras superficies como estufas, muebles, ventanas, el papel mural y a decorar su casa.
Reconocimiento:
Su popularidad se extendió por el país en los años 50. Al principio, vendía sus cuadros por solo unos pocos dólares en la puerta de su casa. Pero con el tiempo, su arte se hizo famoso. Incluso el presidente de los Estados Unidos quiso un cuadro suyo.
La Casa Blanca adquirió dos de sus pinturas por más de 16.000 dólares.
¿Qué pintaba Maud?
A Maud le encantaba pintar la vida a su alrededor. En sus cuadros había casas de colores, carritos tirados por caballos, gatos traviesos, pájaros felices, paisajes y mucha nieve. Sus pinturas parecían sacadas de un cuento, con colores brillantes y formas sencillas.
¿Cómo pintaba?
Sus obras expresan alegría a través del arte naíf, simples y sencillas, con inocencia y colores vibrantes, sin preocuparse por las reglas del arte. No mezclaba los colores como los grandes artistas, sino que usaba los tonos más brillantes y puros y sin sombra.
¡Su arte era como una fiesta de colores en un día de invierno!
Hoy, su casita está en un museo, Galería de Arte de Nueva Escocia, y sus cuadros son admirados en todo el mundo.
La historia de Maud Lewis nos enseña que cuando hacemos lo que amamos, no hay límites para la creatividad.
¡Así que nunca dejes de soñar y de pintar tu propio mundo con colores!
Taller "Ventanas al Mundo de Maud Lewis" Crea tu propio Diorama en 3D
Inspirado en el encantador y colorido universo de la artista canadiense Maud Lewis, en este taller exploraremos la alegría de lo simple y lo cotidiano a través de un formato tridimensional: ¡el diorama! que es una maqueta en 3D que representa una escena con profundidad y detalles por medio de capas creando distintos planos que generan un efecto de profundidad: Es como una ventana a otro mundo en miniatura.
Tomando como punto de partida el estilo naïf y luminoso de Maud Lewis, cada participante diseñará su propia escena: una granja con animales, un paisaje floreado, un paseo en carromato, sus clásicos gatitos.
Un diorama puede ser súper realista o totalmente imaginativo, ¡todo depende de tu creatividad!
¿Qué aprenderás?
Quién fue Maud Lewis y por qué su arte sigue inspirando.
Cómo construir un diorama por capas para crear profundidad y perspectiva.
Técnicas de recorte, ensamblaje y composición en 3D.
Aplicación de colores planos y brillantes al estilo folk-art y naif.
Desarrollo de tu propia narrativa visual: contar una historia con formas y colores.
¿Te animas a crear una ventana a otro mundo?